"Urgente. Quiero comunicar que un grupo de vecinos de #Bolivia nos están escondiendo (a mi y a un colega de México) porque dicen que hay ´policías de civil´ que nos buscan", escribió el periodista argentino Fernando Ortega Zabala desde Bolivia, donde se encuentra acreditado cubriendo los días después del golpe de Estado que terminó con el gobierno de Evo Morales.

El relato, que constó de unos pocos tuits, alcanzó para pintar una situación de desastre humanitario que parece agravarse día a día a galope de un gobierno dictatorial cívico-militar que promete más sangre y detenciones en el corto plazo.

Luego el cronista fue más allá: "El barrio 25 de Julio de Senkata, a pocos kilómetros de El Alto, está rodeado de militares y policías que reprimieron todo el día".

Luego de ese último mensaje en el que dijo estar bien dejó de escribir pero en su cuenta de Twitter quedaron otros registros que había realizado horas antes.