La diputada provincial Adriana Díaz presentó un proyecto de resolución en el que solicita al Poder Ejecutivo Provincial informe sobre “si poseen algún registro oficial sobre la existencia de una supuesta organización llamada “Compañía Águilas Negras NOA”, y de existir, informe sobre su estado de situación, objetivos, actividades permitidas o autorizadas, e integrantes de la misma". Águilas Negras se presenta como una organización cívico-militar.

La legisladora menciona en sus fundamentos una publicación de El Ancasti, titulada "Polémica por la participación de una organización paramilitar", en la que se relata que durante el acto por el Día de los veteranos y caídos en la guerra de Malvinas que se realizó en El Rodeo, participó una organización denominada "Compañía Águila Negra" que "portaba armas y que se presentó con vestimenta militar y luciendo simbología cercana a la que caracterizaba el nazismo".

Díaz sostiene que se advierte “una situación que puede ser irregular, ya sea por la utilización de uniformes militares, pero fundamentalmente por la portación de armas de fuego, ya que no tendría esa organización, ninguna vinculación con fuerzas de seguridad alguna, sean nacionales, provinciales o municipales. Cabe preguntarnos si quienes portan armas de guerra cuentan con la debida autorización de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC), dependiente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, o la Credencial de Legítimo Usuario Individual de Armas de Fuego (CLUSE). No es menor la situación descripta”

Más adelante la diputada del Partido Intransigente recuerda que “la portación de armas de uso civil sin contar con la debida autorización legal constituye un delito con una pena de prisión de 6 meses a 2 años, que se extiende a los 6 años de prisión de comprobarse que son armas de guerra (Código Penal Argentino, Art. 189bis)”.

Con armas, uniformados y la cara pintada

Águilas Negras se presenta también como una ONG que realiza tareas solidarias en el interior de la provincia, pero tal objetivo no condice con la portación de armas –se desconoce si verdaderas o réplicas-, el uso de uniforme militar y el recurso de pintarse las caras, como sucede con los verdaderos efectivos militares que entran en combate.

Un antecedente colombiano

El nombre elegido por este grupo es asimismo polémico. Aunque es probable que sea una desafortunada coincidencia, la denominación elegida remite a un antecedente nefasto en la historia reciente de América Latina. Águilas Negras también se llama una organización paramilitar colombiana financiada por el narcotráfico.

Fuente: elancasti.com.ar