El presidente saliente, Alberto Fernández, postergó su visita al Vaticano y suspendió su reunión con el Papa Francisco para seguir adelante con la transición presidencial en el marco del cambio de Gobierno que tendrá a Javier Milei como nuevo mandatario a partir del 10 de diciembre. Además, confirmó que residirá en España tras finalizar su período como Jefe de Estado.

Según informaron fuentes oficiales, "el Presidente no viajará al Vaticano porque debe seguir adelante con las tareas que demanda la transición. La visita al Sumo Pontífice se reprogramará para cuando ya esté instalado en España luego de dejar el gobierno el 10 de diciembre".

El mandatario saliente había anunciado esta semana su viaje previsto para la última semana de noviembre, que se iba a centrar en la última visita al Papa Francisco en calidad de presidente. Se iba a tratar de uno de los últimos actos del jefe de Estado antes del recambio institucional del 10 de diciembre, cuando el presidente electo Javier Milei inicie su período de Gobierno.

La cita del mandatario con el sumo pontífice iba a tener lugar en el Palacio Apostólico para completar la tercera de una serie de encuentros protagonizados por Alberto Fernández. Desde su asunción en diciembre de 2019, el Presidente tuvo dos charlas cara a cara con Jorge Bergoglio: la primera, en enero de 2020 en el estudio del Aula Pablo VI del Vaticano, mientras que la segunda se llevó a cabo el 31 de enero de 2020 en la Biblioteca del segundo piso del Palacio.

En paralelo, el Papa Francisco ya se comunicó con Javier Milei, el presidente electo, para felicitarlo por su victoria en el balotaje presidencial del pasado domingo y le realizó un obsequio a pocas semanas de asumir al mando de la gestión nacional.

Alberto Fernández confirmó que se irá a vivir a España luego del 10 de diciembre

Además, el presidente Alberto Fernández anunció que se irá a vivir a España a partir del 10 de diciembre, día en el que asumirá Javier Milei como mandatario electo: "Me parece que está bien que tome distancia".

En una entrevista con el diario El País de España, el mandatario confirmó su ida: "Tengo algunas propuestas para irme a España a volver a dar clases. Me parece que está bien que tome distancia. Felipe González decía que los expresidentes somos floreros chinos, porque somos valiosos pero no saben adónde meternos. Hay que dejar que el que llega pueda trabajar sin tener eso que uno tuvo desde el primer día, que fue el acoso permanente de no dejarnos hacer".