"Estoy a disposición de la Justicia, respondí todas las preguntas que me hicieron, vine como corresponde y me retiro", añadió brevemente el funcionario comunal tras permanecer durante tres horas en la sede judicial.

Pero la indagatoria a Varisco no fue la única novedad política en materia judicial. La subdirectora de Seguridad de Paraná, Griselda Bordeira, quedó detenida tras ser indagada al tiempo que el concejal de Paraná Pablo Hernández (Cambiemos) también fue detenido al finalizar su indagatoria ante el juez Ríos.

Mientras se llevaban a cabo las respectivas indagatorias al intendente, la funcionaria y el concejal efectivos de la división Lavado de Dinero de la Policía Federal allanaron dependencias de la sede comunal de Paraná.

La causa que lleva adelante Ríos comenzó en mayo del año pasado tras el hallazgo de una avioneta con 317 kilos de marihuana en un campo de Colonia Avellaneda, localidad vecina a Paraná. Por ese hecho se encuentra detenido Daniel "Tavi" Celis, acusado de liderar la banda que contrabandeó esa droga, junto a otros sospechosos.

En el marco de esa pesquisa, y a raíz del análisis de los mensajes en los teléfonos secuestrados al detenido y otros elementos, a principios de mayo pasado el juez ordenó un allanamiento en la Municipalidad de Paraná, en el Concejo Deliberante y en varios domicilios, entre ellos el de Varisco, el de su madre y los de otros funcionarios. Luego de analizar los elementos secuestrados, Ríos citó a declarar a Varisco, al concejal Hernández y a la funcionaria Bordeira, entre otros.

La sospecha es que hubo un nexo entre al menos un concejal con el detenido Celis, de quien se cree que manejaba el negocio del narcotráfico en Paraná desde prisión a través de su esposa, Luciana Lemos, apresada en su domicilio de la capital entrerriana.