Recién aterrizado en Escocia e instalado en el hotel Double Tree, Alberto Fernández habló con los medios enviados a la cobertura de la gira presidencial y se mostró “satisfecho” con el resultado de la cumbre del G20, en la que Argentina logró la inclusión en el documento final de dos recomendaciones que podrían destrabar la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Cauto, el Presidente prefirió no hablar de triunfo, aunque señaló que el Gobierno logró los objetivos que se había planteado en la previa de la cumbre que se celebró en Roma durante el fin de semana y ahora espera por la resolución del directorio del Fondo, que se reunirá en diciembre. Fernández participará a partir de este lunes de la cumbre de convención sobre cambio climático que se reúne en Glasgow.

-Teniendo en cuenta la reunión con Kristalina Georgieva y el documento final del G20, ¿cuán cerca está la Argentina de lograr el acuerdo con el FMI? ¿El proceso de negociación se puede acelerar?

-El proceso de negociación está en este momento en curso. Martín Guzmán y Gustavo Beliz se quedaron en Roma con el equipo. Lo que tuvo mucho sentido en el G20 para la Argentina es que vinimos a plantear lo que está pasando en nuestra parte del mundo: el mundo de la post pandemia es un mundo sufrido, donde hay muchos países endeudados y en crisis. Lo que hice fue marcar los problemas de financiamiento que atravesará el mundo después del coronavirus. Fue una constante en mis tres discursos advertir que estamos ante un problema económico de gran seriedad, de enorme desigualdad, que esa desigualdad reclama financiamiento y que ese financiamiento el mundo desarrollado lo tiene cubierto.

-Según el acuerdo, Argentina tiene que pagar cerca de 18 mil millones de dólares el año que viene. ¿Llega a cerrar la negociación para cumplir?

-Es evidente que la Argentina no puede pagar 19 mil millones de dólares el año que viene. Trabajamos para lograr un acuerdo que sea sostenible. Esto quiere decir, que no postergue el crecimiento y el desarrollo que la Argentina está sintiendo, que no nos imponga un plan que socialmente cueste y que se pueda cumplir en el tiempo. Está claro que lo que firmó Mauricio Macri es de imposible cumplimiento y que fue un acuerdo de un plan que propuso el Fondo, que en la primera revisión demostró su fracaso.

-¿El documento del G20 implica que los representantes de los países firmantes van a votar a favor de la postura argentina en el tema de los sobrecargos y el fondo de resiliencia en el directorio del Fondo?

-Desde el primer día llevo un trabajo laborioso con toda Europa que en esta oportunidad volvió a repetirse, con Angela Merkel, Emmanuel Macron, Pedro Sánchez, Italia, los comisionados europeos. Tienen todos el mismo sentido: primero agradecer y seguir buscando el apoyo de ellos, que hasta aquí siempre hemos conseguido, para tratar de resolver el tema de la deuda con un sentido razonable. Lo que logramos hoy es que el G20 entienda el planteo de Argentina y que no solamente proponga fondos de resiliencia para los países de renta baja y media - que era nuestro reclamo, porque los países de renta media contienen el 60% de la pobreza en el mundo -, sino que también el G20 le planteó al Fondo la necesidad de seguir avanzando en el directorio de diciembre en la resolución del tema de los sobrecargos. Estoy satisfecho, porque los objetivos que nos fijamos los logramos y pudimos avanzar en algunos otros. Eso para mí es valioso, el vínculo con Europa es muy importante para que podamos seguir con nuestros planteos ante la comunidad financiera internacional.

-¿Cuáles son las conclusiones del encuentro con Kristalina Georgieva? ¿Esperaba algún tipo de punto de inflexión que permitiera avanzar en la negociación?

-La negociación va avanzando con las dificultades que la negociación supone. Hay muchos intereses en pugna. Hay un mundo financiero que ha demostrado un fracaso y que se resiste a cambiar y a aceptar la crisis que ha generado. La reunión fue buena, después a la noche la encontré en la cena y volvimos a hablar. Fue muy bueno. Nos dijimos francamente las cosas, ratificamos nuestro deseo de cumplir los compromisos, pero no a costa de postergar a la gente.

-¿Qué significa que la reunión fue buena?

-Fue fructífera, buscamos mecanismos para seguir avanzando y encontrar puntos de acuerdo. Hablamos de los sobrecargos y me dijo que eso estaba previsto para ser analizado en el directorio de diciembre. Me voy satisfecho. Inclusive, en la premura de buscar una solución, se quedaron los equipos del Fondo con Guzmán y Beliz a la cabeza para seguir trabajando. Tenemos un permanente contacto, la predisposición existe.

-¿Habló con Joe Biden sobre un posible viaje a Estados Unidos?

-No hablamos nada de un viaje. Fue muy lindo encontrarlo, veo muchos de sus planteos con simpatía.

Fuente: Letra P