Zelenski "quiso la guerra. Si él no hubiera querido la guerra, habría negociado un poco más. Es así. Yo hice una crítica a Putin cuando estuve en Ciudad de México diciendo que invadir estaba mal. Pero creo que nadie (más) está buscando contribuir para tener paz", señaló.

En la nota titulada "El Segundo Acto de Lula", que fue portada de la edición, el exmandatario culpó a las sanciones impuestas a Rusia de la inflación global y dijo que Estados Unidos y la Unión Europea (UE) debieron haber aceptado la exigencia de Putin de que Ucrania no se incorporara a la OTAN, algo que Moscú ve como una amenaza y que fue uno de los argumentos rusos para invadir a su vecino.

"Nadie quiere contribuir a la paz"

"Creo que nadie quiere contribuir a la paz. Las personas están estimulando el odio contra Putin. Esto no va a resolver nada. Es preciso estimular un acuerdo, pero hay un estímulo a la confrontación", dijo Lula al medio estadounidense, para el que posó vestido con un saco oscuro y su tradicional corbata con los colores de Brasil.

Consultado sobre cómo sería su gestión en política externa y su relación con otros países a partir de 2023 en caso de victoria en los comicios de octubre, dedicó unas palabras a la forma de operar de Zelenski.

"No conozco al presidente de Ucrania. Ahora, su comportamiento es un poco extraño, porque parece que forma parte de un espectáculo. Aparece en la televisión de mañana, tarde y noche, aparece en el Parlamento británico, en el alemán, en el francés como si estuviera haciendo campaña. Lo necesario es que estuviera más preocupado con la mesa de negociación", afirmó.

"Deberían haber tenido una conversación más seria con él: 'Mire, usted es un buen artista, usted es un buen comediante, pero no vamos a hacer una guerra para que usted aparezca'", opinó.

La responsabilidad de Estados Unidos y la Unión Europea

Si bien se mostró contrario a la decisión de Putin de atacar a su vecina Ucrania, como ha hecho desde el comienzo del conflicto bélico, subrayó que la inflación global es consecuencia de las sanciones que Estados Unidos y la UE impusieron a Rusia por la invasión.

En ese marco, fustigó la falta de claridad sobre la expansión de la OTAN, la alianza militar liderada por Washington, hacia las fronteras rusas y opinó que "Estados Unidos y la UE deberían debería haberle asegurado a Putin que Ucrania no se uniría a la OTAN", una situación que según el brasileño sería comparable con la crisis de los misiles soviéticos en Cuba de 1962, tras la cual EEUU y la extinta Unión Soviética decidieron eliminar el despliegue de misiles en terceros países.

“La guerra no es una solución. Y ahora vamos a tener que pagar la factura por la guerra en Ucrania. Argentina, Bolivia también tendrán que pagar. No estás castigando a Putin, estás castigando a muchos países diferentes, estás castigando a la humanidad”, sostuvo.

Y añadió, poniendo especial énfasis en la responsabilidad del presidente estadounidense Joe Biden. “Estados Unidos tiene mucha influencia política. Y Biden podría haber evitado (la guerra), no incitarla. Podría haber participado más. Biden podría haber tomado un avión a Moscú para hablar con Putin. Este es el tipo de actitud que esperas de un líder”, reflexionó Lula.

Nueva gobernanza mundial

Respecto a una eventual invitación para que Brasil entre a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), el exmandatario brasileño dijo que no la aceptaría porque "solo piensa en la paz".

En su evaluación, también dirigió una crítica hacia la ONU y remarcó la importancia de crear una "nueva gobernanza mundial" dado que el organismo ya "no representa nada" y "no es tomado en serio por los gobernantes".

"Putin invadió Ucrania de forma unilateral, sin consultar a la ONU. Estados Unidos normalmente invade los países sin conversar con nadie y sin respetar al Consejo de Seguridad. Entonces es necesario que reconstruyamos la ONU", insistió.

Venezuela y Colombia

En otro tramo de la entrevista, el fundador del Partido de los Trabajadores (PT), que el sábado lanzará su candidatura a los comicios presidenciales del 2 de octubre con un acto en San Pablo, se negó a condenar al Gobierno venezolano del presidente Nicolás Maduro y expresó que estuvo "muy preocupado" cuando Estados Unidos y sus aliados reconocieron como presidente y líder opositor al diputado Juan Guaidó.

“Para que Guaidó sea presidente, tendría que ser elegido. La burocracia no puede sustituir a la política. En política, son dos jefes de Estado que gobiernan, ambos elegidos por su pueblo, los que tienen que sentarse en la mesa de negociación y mirarse a los ojos y hablar”, manifestó.

También dedicó unas palabras a cuestionar la política energética del candidato favorito a vencer en las elecciones presidenciales de este mes en Colombia, el dirigente de izquierda Gustavo Petro, que prometió abandonar la exploración petrolera. "Petro tiene derecho a proponer lo que quiera. Pero en el caso de Brasil, esto no es real. En el caso del mundo, no es real. ¿Podría detener la exploración de nuevos yacimientos de petróleo mientras extrae el petróleo que Brasil ya ha descubierto? No, mientras no tengas energía alternativa, seguirás usando la energía que tienes”, afirmó.

En ese sentido, Lula prometió ampliar la inversión en la compañía energética estatal brasileña Petrobras, en refinerías, para eliminar la paridad del precio internacional de petróleo con el costo local de los combustibles, política que fue instaurada por el expresidente Michel Temer y luego continuada por el actual, Jair Bolsonaro, la cual ha disparado el precio de las naftas y el diésel.

Según definió Lula, la política energética es una cuestión de soberanía. Y puso como ejemplo a Alemania y su decisión de abandonar el desarrollo de la energía nuclear: “Piensa en nuestra querida Alemania. Angela Merkel decidió cerrar todas las centrales nucleares. Ella no contaba con la guerra en Ucrania. Y hoy, Europa depende de Rusia para la energía”, sostuvo Lula a Time.