El Gobierno de Joe Biden dio este miércoles un giro de 180 grados en su posición y apoyó la exención de las patentes de las vacunas contra el coronavirus, un pedido que hasta ahora las principales potencias del mundo y fabricantes de los inoculantes rechazaban en la Organización Mundial del Comercio (OMC). Argentina, India y Sudáfrica, entre los países que encabezan la promoción de la suspensión temporal.

"Se trata de una crisis sanitaria mundial, y las circunstancias extraordinarias de la pandemia de Covid-19 exigen medidas extraordinarias. El Gobierno cree firmemente en las protecciones de la propiedad intelectual, pero, en aras de poner fin a esta pandemia, apoya la exención de esas protecciones para las vacunas contra el covid-19", aseguró la representante comercial estadounidense Katherine Tai en un comunicado, citado por la agencia de noticias Sputnik.

Tai difundió esta tarde la postura de Estados Unidos respecto a la suspensión temporal de las patentes, en una decisión que, de aprobarse, abarcaría a laboratorios de dicho país como Pfizer y Moderna, a las que el gobierno - durante la gestión de Donald Trump - dotó de multimillonarias partidas de fondos para apurar el desarrollo de los inoculantes.

La embajadora ante la OMC consideró que "tiempos y circunstancias extraordinarios" con los que atraviesa el planeta por la pandemia "exigen medidas extraordinarias". Estados Unidos, dijo, apoya "la exención de la protección de la propiedad intelectual en las vacunas COVID-19 para ayudar a poner fin a la pandemia" y adelantó que participarán "activamente en las negociaciones de la OMC para que eso suceda".

Una medida de tal magnitud es reclamada desde hace meses por países como Argentina, India y Sudáfrica, entre otros. Si bien el apoyo de EEUU es clave para lograrlo, la embajadora consideró que las negociaciones "tomarán tiempo dada la naturaleza de consenso de la institución (OMC) y la complejidad de los temas involucrados".

Los laboratorios ya adelantaron en distintas oportunidades su disconformidad respecto a una suspensión de las patentes bajo pretexto de que esto retrasaría la fabricación de las vacunas y las disuadiría de realizar nuevas investigaciones. Sin embargo, cabe aclarar que los principales inoculantes desarrollados hasta el momento tuvieron lugar gracias a la transferencia de dinero por parte de los Estados.

El objetivo de la administración de Biden "es llevar la mayor cantidad de vacunas seguras y efectivas a la mayor cantidad de personas lo más rápido posible", agregó Tai. Actualmente, según diversos estudios, los países más ricos del planeta que agrupan al 16% de la población mundial acapararon más del 50% de las vacunas fabricadas y distribuidas, mientras que los más pobres aún no lograron hacerse de ninguna dosis.

Hasta la semana pasada se llevaban distribuidas 1.000 millones de vacunas en todo el mundo. De ese volumen, 29% se distribuyeron en EEUU, 13% en la Unión Europea y 5% en el Reino Unido. Estos tres destinos concentran el 50% de las dosis fabricadas.

Asimismo, los países más poblados del planeta como China ( 1.400 millones de personas) e India (1.366 millones), obtuvieron el 22% y el 14% respectivamente. En tanto que África apenas logró obtener 1,4%.