Un River alternativo y ya clasificado como segundo en la Zona 1 de la Copa de la Liga cerró la fase de grupos con un triunfo ante Platense en el Monumental

En un estadio repleto a pesar de que no había nada en juego, y en el marco de la fecha 14 del certamen, el conjunto de Marcelo Gallardo se puso en ventaja con un buen gol de José Paradela en el primer tiempo, pero a los dos minutos igualó Brian Mansilla tras un error defensivo. En el complemento, el ingresado Julián Álvarez, tras un controvertido penal, puso cifras definitivas.

El último campeón del fútbol argentino terminó segundo con 29 unidades, a una del líder Racing, y el equipo de Vicente López penúltimo, con 10 puntos.

El club de Núñez seguirá su camino en la Copa de la Liga Profesional cuando enfrente entre semana a Tigre por los cuartos de final.

El resumen de River 2 - Platense 1 por la Copa de la Liga

River necesitó de Julián Álvarez para lograr los tres puntos ante Platense. El próximo atacante del Manchester City de Inglaterra reanimó el ataque de su equipo y convirtió el 2-1, luego de una jugada previa que generó la protesta del visitante por una dudosa falta cometida por Ignacio Schor.

Elías Gómez buscó el desborde por la banda izquierda y sintió el contacto de Ignacio Schor en su intento de quitarle la pelota. El árbitro Patricio Loustau no dudó en cobrar penal y ni siquiera fue alertado por el VAR, ante el reclamo airado de todo Platense.

Los cambios de Marcelo Gallardo le dieron otro aire a un River que evidenció muchos problemas en el primer tiempo. Empezó con una línea de tres en el fondo, con la vuelta de Javier Pinola, que cometió varias equivocaciones, entre ellas en el gol de Platense.

El arquero debutante Ezequiel Centurión cedió con la mano para Leandro González Pírez y éste intentó devolver la pelota, pero el pase fue defectuoso e interceptado por Horacio Tijanovich, para la posterior definición de Mansilla, ante el quedo de Emanuel Mammana.

River se puso en ventaja antes con el gran remate de Paradela, de buen primer tiempo, pero la celebración le duró un suspiro, por error propio.

La primera parte resultó entretenida entre el intento de River en busca del segundo y sus desaciertos en defensa y mediocampo, especialmente en las salidas de un errático Bruno Zuculini.

La sociedad entre Cristian Ferreira y Paradela funcionó de ratos, mientras Platense buscó el ataque por el sector de Elías Gómez.

La historia se modificó para River con el paso de la línea de cuatro en la defensa en el segundo tiempo y los ingresos de los habituales titulares, aunque sin el brillo de otros partidos.

El público recién se levantó con el gol de Julián Álvarez. El partido sirvió para que algunos aprovecharan su oportunidad, caso de Ferreira y Paradela, y otros no pudieron mejorar su presente, como Braian Romero y Agustín Palavecino.